Nunca te ha pasado que intentas ahorrar y eres incapaz. ¿Te aumentan el sueldo y este incremento desaparece por arte de magia?. ¿Conoces a alguien que le ha tocado la lotería, y en unos meses vuelve a estar en la misma situación con apuros económicos.?
En este post vamos a hablar de ¿Por qué el aumento de tus ingresos generalmente no supone una mejora financiera para la mayoría de las personas?, ¿El ahorro te cuesta?, ¿Veamos a qué se debe esto?
La Ley del Gasto Creciente
Esto se debe a la ‘Ley del Gasto Creciente’, esta ley dice que a medida que nuestros ingresos aumentan, lo hace también nuestra calidad de vida.
Si nos suben el sueldo 100 euros al mes, nuestra calidad de vida va aumentar 100 euros al mes, puesto que nos decimos a nosotros mismos frases como: ‘Me lo he ganado’, ‘Me merezco el ascenso, así que voy a salir a cenar más veces a celebrarlo’, ‘El dinero está ahí para gastarlo’, ‘Si tengo el dinero, ¿por que no me lo voy a gastar?, solo se vive una vez’.
De esta forma entramos en la psicología que esta sociedad nos da por defecto que es el consumo. Si tienes el dinero vas a tener mil tentaciones para gastarlo y aumentar tu calidad de vida.
La Calidad de Vida y su relación con el ahorro
Por calidad de vida nos referimos a la cantidad de dinero que te gastas al mes. Si te gastas 1000 euros al mes tienes menos calidad de vida que si te gastas 2000 euros al mes, ¿por qué? porque con 2000 puedes comprar alimentos, tener un coche de mejor calidad, una casa más grande, pagar una mejor educación a tus hijos, etc.
Pero ¿qué es lo que pasa si aumentas tu calidad de vida, a la vez que ganas un poquito más?
Lo que pasa es que te acomodas y te habitúas a tu nuevo nivel de vida. El hecho de acomodarte hace que después no sea tan fácil volver a reducir tu nivel de vida y volver a los gastos que tenías antes. Por ejemplo, si sales a cenar fuera 1 vez por semana con tu pareja, reducir tu calidad de vida y salir 1 vez por mes, no agrada a nadie.
Por eso hay que tener siempre muy presente esta ‘Ley de Los Gastos Crecientes’ y mantener nuestros gastos y nivel de vida controlados, evitando acomodarnos a niveles de vida altos aunque tengamos el dinero, puesto que debido a esto caeríamos en la trampa de vivir en ‘La Línea Roja’ que viene a ser: ganar prácticamente lo mismo que nos gastamos en un mismo periodo de tiempo; rigidizando tu economía personal y haciéndote poco resiliente ante imprevistos.
Cómo no caer en la trampa
Entonces, ¿qué es lo que hacemos para evitar que ‘La Ley de los Gastos Crecientes’ nos controle?
Sencillamente el hecho de conocer esta ley, te hace consciente ya te evita que caigas en ella. A diferencia de muchas personas que no saben sobre finanzas personales y simplemente gastan, gastan y gastan, acomodándose a un nivel de vida cada vez mayor.
A partir de ahora, cada vez que tengas un incremento de capital por la razón que sea, ten presente las consecuencias de aumentar tu calidad de vida, y valora la posibilidad de ahorrar e invertir para tener más capital en el futuro.
Cómo me enfrento a esta situación
Pero te estarás preguntando ¿Durante toda mi vida voy a tener que vivir con mi nivel actual de calidad de vida? La respuesta es, no.
La regla correcta para aumentar tu calidad de vida, no es cuando tienes un incremento de capital por tu trabajo, una herencia o la lotería. Sino que la regla es: ‘Que tus activos paguen tu nivel/calidad de vida’ . Por ejemplo, si tienes una casa alquilada, esta es un activo y el ingreso que esta genera sí lo puedes dedicar a aumentar tu calidad de vida o si inviertes en acciones, los beneficios generados de una forma consistente, sí pues utilizarlos para costearte tu nivel de vida. Hasta entonces, el ahorro debe de ser una prioridad ya que con este podrás comprar los activos.
El tema de activos requiere una explicación más detallada que veremos en otros posts, pero la idea está clara, ‘La Ley de los Gastos Crecientes’ te va a forzar a gastar y aumentar tu nivel de vida, tu trabajo es controlar y gestionar correctamente esto para que no suponga un lastre en tu economía familiar, así que, ¡Controla tu calidad de vida siendo el ahorro un pilar!
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